Con más medio siglo de carrera, nada nuevo se puede decir que no esté dicho ya de los británicos The Pretty Things, pioneros del sonido crudo y avanzados de lo que luego se llamó garage-rock. Aunque no han alcanzado el merecido reconocimiento que otros sí han conseguido, su influencia en posteriores formaciones ha sido evidente: Iggy Pop, Ramones, Sex Pistols, Nirvana… La lista es interminable.
¿La mejor banda de R&B británico de la historia? Algunos lo piensan. Lo que nadie discute es que son una de las bandas más importantes del Rock&Roll británico de todos los tiempos.
Al margen de ello, para la historia The Pretty Things han dejado álbumes clásicos como “S.F. Sorrow”, la primera ópera rock, “Parachute”, disco de 1970 por la revista Rolling Stone, y temas como ‘Don’t bring me down’ o el single ‘Rosalyn’ con el que se dieron a conocer y con el que sentaron las bases del garage punk de los 60. ¡Ahí es nada!
Los denominados en sus inicios por los medios como ‘Primos Feos de los Rolling’ están de vuelta después de siete años sin editar material nuevo; y lo hacen con “The Sweet Pretty Things (Are In Bed Now Of Course)” (2015), duodécimo largo de su amplia carrera.
A destacar, cómo no, en este trabajo la presencia de dos de los miembros originales de la banda para el nuevo largo: el vocalista Phil May junto al primer bajista de los Rolling Stones, Dick Taylor, que ha regresado como guitarrista. Y acompañados por Frank Holland, George Perez, Mark St. John y Jack Greenwood.
Una decena de temas entre los que se incluyen ‘The same sun’, ‘You took me my surprise’, ‘Dirty song’ o ‘Reinassance fair’, que sonarán el 5 de noviembre en la bilbaína Satélite T.
